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Decidió mantenerse a la defensiva, dada la superioridad enemiga en medios, opción que mantuvo hasta el final del conflicto. La tecnología y la munición de la época daban ventaja a los que adoptaban la estrategia defensiva, la que había escogido acertadamente Davis al principio de la guerra. Davis trasladó el gobierno a Richmond en mayo de 1861, después de que Virginia se uniese a la Confederación. En Lagos, Nigeria ocurre una explosión en un oleoducto que dejó 15 muertos y 50 heridos. Wikimedia Commons alberga una categoría multimedia sobre Nike. Al mismo tiempo, son atuendos resistentes, por lo que su permanencia, está garantizada, especialmente si nos decantamos por marcas con una categoría garantizada. Se negó a medir en la disputa entre Leonidas Polk, amigo suyo, y Braxton Bragg, que había sido batido en varias batallas importantes y que no inspiraba confianza en sus subordinados. El progresivo empeoramiento de la situación militar confederada hizo que las potencias fuesen perdiendo confianza en que el nuevo Estado pudiese permanecer independiente.

El nuevo Estado tenía además que vigilar a los casi cuatro millones de esclavos negros, que tenían tirantes relaciones con sus amos. Robert Toombs, oriundo de Georgia, fue el primer secretario de Estado y Christopher Memminger, de Carolina del Sur, el primer secretario del Tesoro. Por su parte, Walker renunció de su cargo de secretario de Guerra el 17 de septiembre por desacuerdos con Davis, que había criticado su gestión y sugerido que asumiese otra cartera ministerial. LeRoy Pope Walker, de Alabama, fue el secretario de Guerra, por recomendación de Clement Clay y William Yancey, replicas camisetas futbol que habían rechazado ingresar en el gabinete. Kentucky como él y que compartía con Davis la preferencia por operaciones más ofensivas. Patty escribe una carta de amor para Charlie Brown, pero él la desecha por error. Esa camiseta, tan arriesgada como exitosa, fue el principio de la revolución para una empresa de origen familiar que apenas cuenta en estos momentos con 40 trabajadores. No es cosa extraña ver a un equipo jugar sus partidos como local con un uniforme que no sea su titular, sino uno cualquiera, sin que el parecido con el contrario fuera el motivo de la variación. Antes de su lanzamiento, algunos críticos predijeron que el nuevo sencillo de Stefani serviría como su regreso oficial a la música pop, luego del lanzamiento de dúos de música country y música estrictamente navideña en los últimos años.

Malta dependía del Reino de Aragón desde hacía siglos y siguió siendo, más en teoría que otra cosa, camisetas futbol baratas un feudo en ese reino español. El Reino Unido la había abolido en la década de 1830, y la proclamación de Emancipación que hizo Lincoln en 1863 hizo aún menos probable el respaldo europeo a la Confederación. Davis tuvo que sustituir al general Joseph E. Johnston al frente del Ejército de Virginia del Norte por Robert E. Lee en junio de 1862, cuando aquel fue herido en los combates. Davis presentó un nuevo Gobierno en marzo de 1862, tras las elecciones de noviembre del año anterior en las que obtuvo la victoria y con ella la confirmación en el cargo. En cualquier caso, Ud. será el único candidato que se podrá ir a casa con la conciencia limpia. La población norteña era casi completamente blanca, mientras que en la del sur abundaba la negra, tanto libre como esclava.

Al principio de la guerra, el norte tenía una población de veintiún millones de personas frente a los nueve del sur. La libre, pese a serlo, no podía servir en el ejército, reservado a la población blanca. La mayoría de los historiadores critican severamente la estrategia militar de Davis, el nombramiento de amigos para los mandos del Ejército y su pasividad ante las crisis que se desataron en la retaguardia. Para Davis, fue palmario desde el principio del conflicto que la supervivencia de la Confederación dependía de la intervención en su favor de las potencias europeas. Durante la campaña de Franklin-Nashville, advirtió al general Beauregard que Kirby Smith no estaba dispuesto a colaborar con él. No nombró a un general en jefe hasta muy avanzada la contienda y hasta entonces prefirió llevar él mismo las tareas correspondientes. John Reagan, de Texas, fue el director general del Servicio Postal y Judah P. Benjamin, de Luisiana, el fiscal general.

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